25/02/2022
En el fascinante mundo de los automóviles, la precisión en el lenguaje es tan importante como la ingeniería bajo el capó. A menudo, surge la duda sobre cómo referirse correctamente a la cubierta que protege el motor de un vehículo: ¿se dice capó o capot? Aunque ambas formas son usadas con frecuencia, solo una es la adaptación adecuada a nuestro idioma, el español.

La palabra en cuestión proviene del término francés «capot». Sin embargo, al integrarse en el léxico español, ha sufrido una adaptación fonética y ortográfica. La forma correcta y aceptada por las normativas de nuestro idioma es capó. Su plural se construye añadiendo una «s» al final, resultando en capós. A pesar de esto, es común encontrar en medios de comunicación y conversaciones cotidianas el uso de «capot», una práctica que, aunque extendida, no se ajusta a la norma. Ejemplos como «el diseño del capot de aluminio» o «faros integrados en el capot» deberían preferiblemente emplear el término adaptado: «el diseño del capó de aluminio» y «faros integrados en el capó».
¿Qué es exactamente el Capó de un Coche?
Más allá de su nombre, el capó es una pieza fundamental en la estructura de un vehículo con motor delantero. Se trata de una cubierta abatible o con bisagras que descansa sobre el compartimento donde se aloja el motor y sus componentes asociados. En algunos países, especialmente de habla inglesa, esta pieza es conocida como «bonnet».
La función principal del capó es doble: por un lado, actúa como una barrera de protección para el motor y otras partes vitales ubicadas debajo, resguardándolas de los elementos externos como la lluvia, el polvo, la suciedad y los pequeños escombros de la carretera. Por otro lado, y de vital importancia, proporciona un acceso sencillo y rápido a estos componentes para realizar labores de mantenimiento, inspección o reparación. Cuando necesitas revisar el nivel de aceite, cambiar una correa o diagnosticar un problema, simplemente levantas el capó.
Materiales de Fabricación del Capó
Tradicionalmente, los capós de los automóviles han sido construidos predominantemente de materiales metálicos, siendo el acero el más común debido a su resistencia, durabilidad y coste relativamente bajo. Sin embargo, con la evolución de la industria automotriz y la búsqueda constante de la reducción de peso para mejorar la eficiencia y el rendimiento, otros materiales han ganado terreno.
El aluminio es otro material metálico empleado en la fabricación de capós, especialmente en vehículos de gama media-alta o deportiva. Es significativamente más ligero que el acero, lo que contribuye a disminuir el peso total del coche y, por ende, a mejorar la aceleración, el manejo y el consumo de combustible. Si bien el aluminio es más caro que el acero, sus beneficios en cuanto a peso justifican su uso en ciertos modelos.
En el mercado de piezas de repuesto (aftermarket) o en vehículos de alto rendimiento y competición, se utilizan materiales aún más ligeros y resistentes. La fibra de carbono es uno de los más destacados. Este material compuesto ofrece una rigidez excepcional y un peso extremadamente bajo, aunque su coste es considerablemente superior. Otros materiales como la fibra de vidrio o el carbono seco (dry carbon) también se emplean por sus propiedades similares, buscando siempre la máxima reducción de peso sin comprometer la integridad estructural.
La elección del material no solo afecta el peso y el coste, sino también la seguridad. El diseño del capó y el material empleado influyen en cómo la energía de un impacto frontal o el atropello de un peatón es absorbida y disipada, contribuyendo a la seguridad pasiva del vehículo.
Mecanismo de Cierre y Seguridad
Para garantizar que el capó permanezca cerrado de forma segura mientras el vehículo está en movimiento, se utiliza un mecanismo de cierre. El sistema más común consta de un pestillo oculto que se bloquea en su lugar. Para abrir el capó, el conductor debe accionar una palanca o tirador, generalmente ubicado en el interior del habitáculo, debajo del volante o en el marco de la puerta del conductor. Al accionar esta palanca, el pestillo principal se libera parcialmente, permitiendo levantar ligeramente el capó. Suele haber un segundo pestillo de seguridad, accesible desde el exterior, que requiere ser liberado manualmente para poder abrir completamente el capó. Este mecanismo de doble seguridad previene que el capó se abra accidentalmente mientras se conduce, lo cual podría obstruir la visión y causar un accidente grave.
En coches de competición o vehículos con capós modificados (aftermarket), en lugar del pestillo oculto, es habitual el uso de pasadores o pines de seguridad expuestos. Estos pines, a menudo visibles en la parte superior del capó, se insertan a través de agujeros en el capó y en la estructura del coche, fijándolo firmemente. Aunque menos estéticos, son muy fiables y permiten una apertura rápida en situaciones de emergencia en pista.
Características Adicionales: Tomas de Aire y Jorobas
Algunos capós no son superficies lisas y uniformes. Pueden incorporar elementos de diseño con una función específica, como las tomas de aire (conocidas en inglés como «hood scoops») o las jorobas (o «power bulges»).

Las tomas de aire son aberturas diseñadas para dirigir aire fresco hacia el compartimento del motor. Esto puede ser útil para mejorar la refrigeración de ciertos componentes o, en el caso de motores con admisión forzada (turboalimentados o sobrealimentados), para alimentar directamente el sistema de admisión con aire más frío y denso, lo que mejora la combustión y aumenta el rendimiento del motor. Aunque algunas tomas de aire son puramente estéticas, muchas tienen una función real en vehículos de altas prestaciones.
Las jorobas o «power bulges» son elevaciones o protuberancias en la superficie del capó. A menudo se diseñan por razones estéticas para dar una apariencia más agresiva o potente al vehículo. Sin embargo, en algunos casos, tienen una función práctica: proporcionar el espacio adicional necesario para alojar un motor más grande, un colector de admisión voluminoso u otros componentes que de otro modo no cabrían bajo un capó plano.
El Futuro del Capó: El Frunk Eléctrico
Con el auge de los vehículos eléctricos (VE), la configuración tradicional del automóvil está cambiando. Dado que los motores eléctricos son considerablemente más compactos que los motores de combustión interna y a menudo se ubican en una posición diferente (por ejemplo, en los ejes), el gran espacio frontal que antes ocupaba el motor queda libre.
En muchos vehículos eléctricos, este espacio se está aprovechando para crear un compartimento de almacenamiento adicional. A esta área, ubicada bajo lo que tradicionalmente sería el capó, se le conoce popularmente como «frunk», una contracción de «front trunk» (maletero delantero). El frunk ofrece a los propietarios de VE un espacio extra muy útil para guardar cables de carga, bolsas de la compra u otros objetos, maximizando la practicidad del vehículo.
Tabla Comparativa de Materiales de Capós
Material | Peso Relativo | Resistencia/Rigidez | Coste Relativo | Uso Común |
---|---|---|---|---|
Acero | Alto | Buena | Bajo | Vehículos de producción masiva |
Aluminio | Medio-Bajo | Buena | Medio-Alto | Vehículos de gama media-alta, deportivos |
Fibra de Carbono | Muy Bajo | Excelente | Muy Alto | Vehículos de alto rendimiento, competición, aftermarket |
Fibra de Vidrio | Bajo | Aceptable | Medio | Aftermarket, algunos vehículos especializados |
Preguntas Frecuentes sobre el Capó
¿Cómo se escribe correctamente, capó o capot?
La forma correcta en español es capó. «Capot» es la palabra original en francés, pero la adaptación al español es con tilde en la «o» y sin «t» final.
¿Cuál es la función principal del capó?
Sus funciones principales son proteger el motor y los componentes relacionados de los elementos externos y permitir un acceso fácil a ellos para mantenimiento y reparaciones.
¿De qué materiales se fabrica un capó?
Principalmente de acero o aluminio en vehículos de serie, y de materiales ligeros como fibra de carbono o fibra de vidrio en vehículos de alto rendimiento o piezas aftermarket.
¿Por qué algunos capós tienen tomas de aire o jorobas?
Las tomas de aire dirigen aire fresco al motor para mejorar la refrigeración o el rendimiento. Las jorobas pueden ser estéticas o proporcionar espacio adicional para componentes grandes bajo el capó.
¿Qué es un «frunk» en un coche eléctrico?
Es un espacio de almacenamiento delantero en un vehículo eléctrico, ubicado donde tradicionalmente estaría el motor de combustión, bajo lo que sería el capó.
Conclusión
La próxima vez que te refieras a la cubierta del motor de un automóvil, recuerda la forma correcta en español: capó. Esta pieza, fundamental para la protección y el acceso al corazón del vehículo, ha evolucionado en materiales y diseño, e incluso ha dado paso a un nuevo concepto en la era eléctrica con el «frunk». Conocer el término adecuado y su significado no solo demuestra precisión en el lenguaje, sino también un mayor entendimiento de las partes que componen estos complejos y fascinantes aparatos que nos transportan día a día.
Si quieres conocer otros artículos parecidos a Capó o Capot: La Forma Correcta en Español puedes visitar la categoría Automóviles.