09/01/2025
El ambicioso proyecto de robotaxis de Cruise, la compañía de vehículos autónomos respaldada por General Motors (GM), ha llegado a su fin. Según una carta enviada a los usuarios el 4 de febrero, la compañía no relanzará su servicio de transporte de pasajeros mediante vehículos autónomos. Esta decisión marca un punto de inflexión significativo en el desarrollo y la implementación comercial de la tecnología de conducción autónoma, especialmente después de una serie de desafíos operativos y preocupaciones de seguridad que culminaron en la suspensión de sus actividades.
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Este anuncio se produce tras la confirmación de que General Motors ha completado la adquisición total de Cruise. Ya en diciembre, GM había manifestado su intención de dejar de financiar el desarrollo específico del servicio de robotaxis de Cruise, señalando una realineación en su estrategia de conducción autónoma. Cruise, que ha sido propiedad mayoritaria de GM desde 2016, ahora verá su tecnología integrada de una manera diferente dentro del conglomerado automotriz.

El Ascenso y la Caída del Servicio de Robotaxis de Cruise
El servicio de robotaxis de Cruise se introdujo al público para servicios de transporte compartido en 2022, expandiéndose a ciudades como San Francisco y Austin. La promesa era revolucionar el transporte urbano, ofreciendo una alternativa de movilidad sin conductor. Sin embargo, desde sus inicios, la operación de estos vehículos autónomos se vio empañada por numerosos problemas e incidentes, generando crecientes preocupaciones sobre su seguridad y fiabilidad.
Una Cronología de Problemas y Suspensiones
La implementación del servicio de Cruise en diversas ciudades no estuvo exenta de dificultades. Se reportaron múltiples incidentes, algunos de los cuales fueron captados en video, que evidenciaron fallos en el comportamiento de los vehículos autónomos en entornos urbanos complejos. Los residentes de ciudades como Austin reportaron seguimientos inusuales y colisiones menores.
En enero de 2023, un ciclista en Austin compartió videos que mostraban vehículos de Cruise circulando por el carril bici o por el centro de la carretera. También reportó haber visto una media docena de estos coches realizar giros a la izquierda incorrectos, lo que generaba situaciones de riesgo y confusión en el tráfico.
El verano de 2023 trajo consigo más problemas. En julio, varios vehículos de Cruise se detuvieron inesperadamente en el centro de Austin, bloqueando el tráfico y obligando a otros conductores a maniobrar para sortearlos. En aquel momento, Cruise explicó que se trataba de un protocolo de seguridad diseñado para proteger el vehículo y a sus pasajeros cuando la tecnología no tenía suficiente confianza sobre cómo proceder. Si bien esto puede ser una característica de seguridad, en la práctica generaba interrupciones significativas en la fluidez del tráfico.
Septiembre de 2023 vio otro incidente llamativo en Austin, donde decenas de vehículos de Cruise se alinearon a lo largo de una manzana en una zona concurrida, bloqueando completamente el tráfico y creando un caos vial. Imágenes y videos de este suceso se viralizaron, aumentando el escepticismo público sobre la preparación de esta tecnología para operar a gran escala.
Estos incidentes culminaron en octubre de 2023, cuando Cruise anunció la suspensión de todas sus operaciones de vehículos sin conductor en Texas, incluyendo Austin. Poco después, la compañía anunció una pausa en todas sus operaciones sin conductor a nivel nacional. Esta decisión llegó tras la suspensión de la licencia de robotaxi de Cruise por parte del Departamento de Vehículos Motorizados de California, citando preocupaciones de seguridad. La suspensión en California fue particularmente impactante porque siguió a un grave incidente en el que un coche de Cruise atropelló a un peatón que previamente había sido golpeado por otro conductor, quedando la persona atrapada bajo uno de sus neumáticos. Este evento puso en primer plano las críticas sobre cómo reaccionan los vehículos autónomos en situaciones de emergencia complejas.

En noviembre de 2023, Cruise no solo pausó todas sus operaciones, sino que también emitió una retirada voluntaria de software y anunció la creación de un puesto de jefe de seguridad, en un intento por abordar las deficiencias identificadas y restaurar la confianza del público y los reguladores.
A pesar de las suspensiones del servicio de robotaxi, Cruise ha estado realizando otras actividades. En abril de 2024, reanudó la conducción manual en Phoenix, Arizona, con el objetivo de crear mapas y recopilar información de carreteras, expandiendo posteriormente esta actividad a Houston y Dallas. En mayo de 2024, la compañía avanzó un paso más al reanudar la conducción autónoma supervisada en Phoenix y Dallas. Estas actividades parecían ser parte de un esfuerzo por reconstruir la base tecnológica y operativa, aunque ya separada del servicio comercial de robotaxis.
Alianzas Fallidas y el Futuro del Transporte Autónomo
El panorama de los vehículos autónomos es altamente competitivo y dinámico. En agosto de 2024, Uber y Cruise anunciaron una asociación para integrar vehículos autónomos en la plataforma de transporte de Uber, proyectando un lanzamiento para 2025. Sin embargo, este acuerdo tuvo una vida corta, ya que Uber anunció posteriormente que se asociaría con Waymo, la compañía de conducción autónoma de Google. Uber y Waymo ya han abierto una lista de interés para pasajeros en la aplicación de Uber, dejando atrás la potencial colaboración con Cruise.
Las últimas noticias sobre actividades de Cruise publicadas en su sitio web, al margen de las operaciones de prueba supervisadas, mencionan asociaciones con organizaciones como el Houston Food Bank (octubre de 2024) y Numotion (diciembre de 2024), enfocadas en el uso de sus vehículos para logística o entregas, no para transporte de pasajeros.
¿Qué Significa el Cierre para los Usuarios y la Industria?
La carta de Cruise a los usuarios fue clara y concisa: el servicio de robotaxi no se relanzará. Para aquellos que estaban en listas de espera o habían experimentado el servicio, esto significa el fin de esa opción de transporte. Antes del cierre, Cruise y Waymo, por ejemplo, habían obtenido permisos para operar y cobrar por sus servicios de robotaxi en San Francisco las 24 horas del día. Esto abrió un debate sobre el modelo de negocio y el costo de estos servicios.
El Costo Histórico de un Viaje en Robotaxi Cruise
Aunque el servicio ya no está disponible, es interesante conocer cómo se estructuraba su precio, según la información disponible antes del cierre. Comparar esta estructura con la de servicios de transporte con conductor o con la de su competidor Waymo ofrece una perspectiva sobre los desafíos económicos del modelo de robotaxi.

| Aspecto del Costo | Cruise (Histórico) | Uber/Competidores (Ejemplo) | Waymo (Ejemplo) |
|---|---|---|---|
| Tarifa Base | $5 | Tarifa Base | Precio Base |
| Costo por Milla | $0.90 | Costo por milla | Incluido en precio |
| Costo por Minuto | $0.40 | Costo por minuto | Incluido en precio |
| Tarifa por Aumento (Surge) | No aplicaba | Sí aplica | No especificado (precio competitivo) |
| Impuestos/Tasas | 1.5% tasa municipal | Tasas e impuestos | No especificado |
| Tarifa de Reserva | No especificado | Sí aplica | No especificado |
| Propinas al 'Conductor' | No aplica | Esperado/Opcional | No aplica |
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